Oculto en la Caja

Oculto en la caja

Una vez, Madre Yashoda estaba en el almacén ocupada ordenando algunas faldas, blusas, chales y otras prendas y adornos caros para ponerlos en un gran cofre. En ese momento, el travieso Krishna irrumpió en la habitación. Se acercó a ella por detrás, le puso los brazos alrededor del cuello e insistió en saber lo que estaba haciendo.

“Mamá, ¿hoy es mi cumpleaños? ¿Me estás preparando toda esta ropa y adornos?”

“Ve a jugar ahora,” respondió Yashoda con una mezcla de diversión e irritación. “No me distraigas.”

Krishna se sintió un poco abatido y se fue, pero sólo para esconderse detrás de una esquina y observar lo que hacía su madre. En realidad, Madre Yashoda estaba preparando una gran caja para enviar cosas preciosas a Srimati Radharani, que vivía en Yavata. Era costumbre suya enviarle regalos de vez en cuando para complacer a Jatila, quien a menudo tenía un carácter un poco gruñón. El propósito era ablandar su corazón, para que no le prohibiera a su nuera venir a Nanda-bhavana.

El astuto Krishna entendió lo que ella hacía, y cuando Su madre terminó de empacar la caja y comenzó a hacer otras cosas, Krishna entró en la habitación con Subala Sakha. Abrieron la caja, la vaciaron y Krishna se metió dentro. Subala cerró la tapa. Todo parecía igual que antes, y nadie se dio cuenta.

Yashoda le había pedido a Abhimanyu que viniera personalmente a recoger la caja, ya que estaba llena de regalos de alto valor y no debía entregarse a nadie más. Entonces, él la colocó sobre su cabeza y, con gran dificultad, la llevó hasta su madre en Yavata-grama.

Jatila dijo:

“Hijo mío, esta caja está llena de ropa y adornos muy caros para Radharani. Ponla en su habitación.”

Abhimanyu asi lo hizo. Colocó la caja en la habitación de Srimati Radharani y se fue.

Cuando las Sakhis abrieron ansiosamente la caja y vieron al travieso Krishna dentro, todas estallaron en risas. Su felicidad no conocía límites. Con intenso amor trascendental, Radha y Krishna se encontraron y disfrutaron de su mutua compañía, lo que llenó a las Sakhis de gran satisfacción.

Esta es una sección del libro “Nandagrama”, en Espanol.

Para comprar el libro completo, haga clic aquí